Esta sábado, los cuatro hermanos de honor de Santa Lucía con sus respectivas «cuadrillas» de familiares y amigos, han salido a recoger las aulagas o «abulagas» con las que prenderán los candelorios del día 12 de diciembre. La aulaga es un arbusto espinoso, de hasta 2 m de altura, muy ramificado y provisto de fuertes espinas laterales muy punzantes, que tradicionalmente ha sido siempre el elegido por los villaduqueños, debido a su fácil combustión.

Cuando han llenado sus respectivos remolques, todos se han juntado en la dehesa boyal, donde han compartido abundante comida, bebida y diversión. Marcelino, Antonio, José y Felipe, son este año los cuatro hermanos de honor, y esperan impacientes los días 12 y 13 de diciembre, donde junto con el resto de miembros de la hermandad celebrarán la Fiesta en honor a la Santa.

El día 12, al toque de ánimas de las campanas, se prenderán los candelorios con aulagas en la puerta de la casa de cada uno de los hermanos, al calor de ellos se reúnen los vecinos y vecinas del pueblo, repartiéndose vino, garbanzos “tostaos” y altramuces, mientras los más jóvenes cantan y bailan, en esta tradicionalmente fría noche, alrededor de los Candelorios de Santa Lucía.

Una fiesta de antiquísima tradición, tal vez poco conocida en la comarca, que conserva costumbres que se pierden en el tiempo y en la que pervive el encanto de lo que aún no ha sido condicionado por la modernidad. Sin duda, una oportunidad única de revivir tiempos ya pasados.

Julio López para villanuevadelduque.com ( puede hacer clic sobre las fotos para ampliarlas ).